Para empezar tendría que hacer una semblanza de mi vida durante los últimos meses. Pero es imposible hacer un recuento de todas las cosas que han pasado desde la última vez que vine a escribir concienzudamente a este lugar.
Muchas de las cosas que verán en las próximas entradas llegaron a mi mente como el proceso natural de cumplir años y sentarte a ver qué es lo que pasa con tu vida. Quizá aún más natural después de los 30 (31 para ser exacto) y que te ponen a analizar lo que hiciste, haces y seguirás haciendo para seguir vivo. Esto y el Manifiesto Holstee, bueeeeno…
Esta es mi vida y soy capoeirista. La capoeira cambió mi vida, la completó, me apoye de ella para salir de un gran bache, me ha dado salud y como en las mejores cosas, me ha dado grandes amigos. Tengo ya un poco más de 4 años practicando, viviendo y disfrutando de ella. Obtuve hace poco el tercer grado (cordao amarelo), el cual muchos consideran (yo también) como el cordón del compromiso. Más allá de no dejar de ser solo el mecatito que impide que se te caigan los pantalones, permite darme cuenta que cuando amas algo con tanto fervor no solo tienes que disfrutarlo, si no también echarle ganas y comprometerte para hacerlo mejor; sobre todo cuando este trabajo rinde más frutos si se considera como un esfuerzo colectivo. Entreno casi todos los días y cuando dejo de hacerlo siento que algo falta.
Esta es mi vida y soy ciclista. Esto ya lo había venido a explicar a detalle hace un par de entradas. La bici es ya, cosa de todos los días. No me cabe en la cabeza el tener que ser parte del tráfico usando el automóvil o sufrir aglomeraciones en el transporte público a menos que sea estrictamente necesario. Mientras pueda seguir montado en una bicla y viajando hasta donde pueda llegar, lo seguiré haciendo. Hoy me siento aún más afortunado porque después de un esfuerzo y algunas (muy) afortunadas carencias pude adquirir a “TIE“, mi nueva bicicleta Alubike modelo Spicy. Una bonita bicicleta urbana que ya trae todo lo necesario para sobrevivir en esta dificil y desafiante ciudad. Hay proyectos de que pronto tenga una hermana y que me anime a entrarle a prácticas medio hipsters de ciertos deportes urbanos que andan ahí escondidos bajo las piedras de la colonia vecina.
Esta es mi vida y quiero ser fotógrafo. Aún no me siento con la pericia, conocimiento, capacidad y talento suficientes para poder decir que ya lo soy, pero me estoy esforzando por convertir una afición en un gusto más enfocado. Quizá no me dedique a ello, pero estoy seguro de que lo que logre de esto es en un plan entusiasta que quiero que permanezca. Siempre me ha gustado capturar imagenes y hacerlas parte de mi (una) historia, por lo que estoy tomando clases, aprendiendo y conociendo muchos aspectos que van mas alla de solo perpetuar una imagen. Si quieren ver como voy pueden echarle un ojo a mi Flickr.
Esta es mi vida y me dedico a las compus. Y lo digo así no por hacer menos lo que hago, pero tampoco hay necesidad de entrar en detalle. Amo mi trabajo, amo mi vocación y lo mejor de esta es que siempre hay cositas por aprender, desarrollar y entender. Tengo la fortuna de poder decir que vivo de lo que me gusta hacer.
Esta es mi vida y amo la música. Me hubiera gustado decir “soy músico” pero desafortunadamente no le llego al concepto. Mi consuelo es que “de músico, poeta y loco…” Me he alejado de algunos aspectos de esa faceta, aunque en capoeira aún ejecuto algunos instrumentos y hago música; de vez en cuando agarro mi guitarra y me pongo a hacer ruiditos. Y si de hacer ruiditos se trata, lo que mas extraño es sentarme a producirlos estando en la compu. Hace poco me hicieron ver que a pesar de no haberme refinado y dedicado mas a este talento tengo la capacidad de apreciar y disfrutar la música como uno de los mas importantes pilares de mi existencia. Escuchar y disfrutar música es mi iniciar, desarrollar y terminar el día. La música es la compañera incansable que siempre va a tener algo importante que decir, hacerte pensar y aderezar tu estado de animo. Ojala tuviera el tiempo para poder escuchar todo lo que tengo; pero si escucho todo lo que quiero.
Esta es mi vida y soy independiente. ¡Wow! Lo dije… Puede sonar un tanto petulante, pero no importa. Lo digo con mucho orgullo. No tiene mucho que di el paso definitivo y más importante que se tiene que dar. Lo sé, algo atrasado, pero nunca tarde. Hoy vivo por mi cuenta y en compañía de un gran amigo. Sin duda de las cosas que más me han hecho sentir satisfecho en los últimos meses.
Esta es mi vida y me gusta escribir. O eso digo yo. En parte, es mi trabajo. Me gustan las palabras, me gusta usarlas bien, me gusta acomodarlas y hacer como que significan algo. Me gusta entretejerlas y confundirlas; que se estorben y molesten. Que a la vez se complementen y que lleguen a todo o nada. Me gusta engañarme haciendo apologías sobre mi retórica. Es algo que sin duda tengo que hacer más seguido y espero que un proyecto que anda por ahí debajo de un capelo me permita hacerlo un poco más. Es evidente que estoy oxidado pero no hay como ponerse en acción para desempolvarse.
Todo suena muy bonito, ¿no? Pero no, no todo es miel sobre hojuelas. Y ya platicaré más adelante que también hay escollos que sortear.
Esta es mi vida y soy un adulto. Pero con todo y eso, no deja de manifestarse en mí el niño que siempre he sido y que siempre seré. Probablemente, esto es de las cosas que seguiré haciendo muy seguido.
Y como una entrada en este lugar no esta completa sin una canción que la acompañe les dejo a Tom Gaebel. Si tuviera que dedicar esta canción tendría que hacerlo a todos esos amigos que están y seguiran ahí acompañandome. Hacen de esta vida algo excelente.
Vitáliy
Qué sosa es la gente para dejar comentarios.. Pues, decirte que me gusta tu forma de pensar y ver las cosas. Siempre ando con estás ideas en la mente, cambio, experimentos, explorar, probar, disfrutar, cometer errores, levantarse y seguir probado. ¡Muy bien! Hace medio año que empece capoeira también, así que muito Axé! Ie capoeira!